El día de mañana, se cumplen 498 años de lo que se conoce, como el día de la Reforma. Damos gracias a Dios, porque en Su soberanía y sabiduría, permitió que las doctrinas gloriosas del Evangelio, tocarán muchas más vidas por medio de este movimiento.
Posiblemente algunos somos nuevos en el tema y no tenemos idea de que sucedió ese 31 de Octubre de 1517, de manera breve puedo decirte, que ese día un hombre sacudió un imperio, su nombre fue Martín Lutero, y su acto de clavar un escrito (conocido como las 95 tesis), en la puerta de una muy conocida catedral de Alemania, fue el detonante para lo que conocemos como la Reforma.
Pero antes de que respondamos, a la pregunta de cómo celebrar, quiero aclarar en que sentido estoy usando la palabra “celebrar”
No uso la palabra celebrar en el sentido de…
- Fiestas o reuniones sin sentido.
- Reunirse para hablar de la reforma en el siglo XVI y hacer un par de “selfies”
- Leer las 95 tesis de Martin Lutero.
- Hacer una copia de las 95 tesis e irlas a clavar a algunas iglesias (aunque creo que Lutero lo haría)
Admito que algunas de las ideas antes mencionadas, no están mal del todo, pero cuando hablo de celebrar, lo digo en el sentido de…
- Dar gracias a Dios por permitir que Su Palabra tocará más vidas.
- Alabar a Dios por Su obra.
- Orar para que más almas vengan al conocimiento del Evangelio.
- Recordar con reverencia, la única y suficiente obra que puede salvar al hombre: la obra de Jesucristo.
- Enunciar que solo a Dios pertenece la gloria.
El día de la reforma, no se trata de Lutero, Zwinglio, Melanchthon, etc, si no que se trata de Dios y de cómo usó a estos hombres para Su gloria. Él dirige todos los asuntos en la Historia.
¿Cómo celebrar el día de la reforma?
Alabando a Dios por su gracia.
Él nos ha traído al conocimiento de Su palabra y de su gracia en Jesucristo. No ha sido nuestro entendimiento o aptitudes que nos han llevado a la salvación, sino que ha sido su gracia.
Compartiendo con otros el evangelio en las redes sociales y en nuestra vida diaria.
Es bueno que compartamos en las redes sociales, imágenes o citas de libros referente al día de la reforma. Pero, no dejemos de compartir la palabra del Único que puede no solo reformar el corazón del hombre, sino regenerarlo.
Así mismo, hablemos con nuestros amigos y familiares, de Aquel que merece la gloria y quién nos ha rescatado de nuestros pecados.
Orando para que Dios sea glorificado en la exposición de Su palabra.
El cristianismo actualmente adolece de muchas cosas, una de ellas, los falsos maestros y falsas enseñanzas. Debemos discernir. Pero, también debemos orar para que Dios auxilie a aquellos siervos que con temor, desean exponer Su Palabra de la mejor manera.
Puede que tú celebres este día o no, o lo hagas de otra forma.
Lo importante es recordar que, solo Dios merece la gloria,
que solo su Palabra es la fuente de verdad inagotable,
que solo Jesucristo es el único mediador,
que solo por la fe en Él somos justificados,
que solo por gracia somos salvos, no hay otra obra que nos ayude a ser salvos.
Y ¿tu de qué manera celebrarás el día de la reforma?